Seguro que en más de una ocasión has oído hablar del famoso mito de la caja de Pandora. Puede que incluso utilices habitualmente esa expresión sin cuestionarte su procedencia. Por si no lo recuerdas, hace tiempo que no lo escuchas, o nunca lo has leído u oído, voy a compartirlo aquí.

Según la mitología griega, Pandora fue la primera mujer hecha a imagen  y semejanza de los mortales moldeada por Hefeso, dios del fuego, con la ayuda de Atenea y del resto de los dioses. Fue ordenada hacer por el dios de dioses, Zeus, para castigar a los humanos y a los Titanes (Prometeo y Epimeteo), dado que Prometeo había robado el fuego divino para proporcionárselo a los hombres y éstos lo habían aceptado y utilizado para alimentarse, elaborar armas, para calentarse, fabricar herramientas…

Zeus decidió enviar a Pandora para llevar al hombre a la perdición. Para ello, cada uno de los dioses del Olimpo proporcionó a Pandora una cualidad diferente, Afrodita le dio una gran belleza, Atenea, sabiduría, Apolo le dio la música, Hermes le dio el don de la seducción, persuasión, manipulación, mentira, las Horas coronaron su cabeza con flores, etc…

El mito de Pandora empieza en el momento en el que Zeus entrega a Pandora, sin revelar el contenido de la misma, una caja para que se la lleve a Epimeteo. Dentro de la caja se encontraban todos los males existentes para terminar con la raza humana (enfermedad, venganza, ira, maldad…) y ella tenía la prohibición de abrirla bajo ninguna circunstancia.

Pandora tenía una gran curiosidad por lo que había en ella y no pudo resistir la tentación de abrir la caja. En ese momento, todos los males se escaparon y se alojaron entre el género humano.

Ante lo sucedido, Pandora tuvo miedo y cerró la caja, pero solamente pudo dejar un elemento sin escapar, la esperanza. Pandora se arrepintió de haber hecho esto al ver los desastres que estaban aconteciendo entre los seres humanos. Para remediarlo, se dedicó a ir ofreciendo a los hombres, uno a uno, la posibilidad de contar con la esperanza, pues ella la tenía, (esta vez sí), bien guardada en la caja.

 

La esperanza es un estado de ánimo optimista basado en la expectativa de resultados favorables relacionados a eventos o circunstancias de la propia vida o el mundo en su conjunto – según definición ofrecida por la Wikipedia. 

¿Sueles tener presente la esperanza en tu vida? ¿Tienes una caja de Pandora llena de esperanza cerca de ti?

¿Tu foco está en la confianza o en su contrario?

¿Vives desde el miedo o desde el amor?

¿Eres de los que comenta los males del mundo sin hacer nada o de los que pone el foco y toma acciones en solventarlos?

¿Qué acciones puedes llevar a cabo diariamente que alimenten tu ESPERANZA y la de los demás?

RESPIRA. RESPIRA Y RESPIRA. Permite que la VIDA, la esperanza, el AMOR, entren en tu día a día. Solo tienes que respirar profundamente, abrirte a algo más que tus pensamientos y permitirte sentir este instante, sea el que sea.

Ahí, en ese estado interior de paz, serenidad, aceptación, (aún con elementos en la superficie que no gustan), verás que también hay ESPERANZA. Allí dentro, en esa isla interior que tu puedes crear para acceder cuando lo necesites, se encuentra tu propia cada de Pandora llena de esperanza.

 

Share